Futuro incierto para los servicios de la empresa Ciudad de Córdoba, que cae en picada

A pocos días de que el intendente le haya quitado la concesión a la empresa Ciudad de Córdoba, se sabe poco de cuál es el futuro de los corredores que tiene a cargo la compañía, sumado a que el servicio ha ido de mal en peor. En el momento que Ramón Javier Mestre anunció que Ciudad de Córdoba perdería el contrato de servicio de transporte, señalo que Ersa, Coniferal y Autobuses se harían cargo de las líneas 20 y 70 que dependen de la compañía.

Sin embargo, con eso se origino la duda al respecto de cómo se van a repartir los servicios, es decir, cual de las restantes tres empresas tendrán que cubrir cada línea. Y sumado a ello, si se iba poder llegar a tiempo con la cantidad de coches necesarios para poder funcionar normalmente.

Hasta el momento, poco se sabe desde la Municipalidad y las empresas cómo se van a repartir las líneas. Por lo pronto, los choferes de Ciudad de Córdoba y la UTA han pedido que no se dividan los trabajadores y que la totalidad vayan a una única empresa: Ersa.

En tanto, con respecto a la cantidad de unidades necesarias para poder reemplazar a la compañia que se va, cabe recordar que hace algunas semanas se denuncio públicamente que en un predio de la concesionaria Mercedes Benz había colectivos de Ersa pintados de color azul, perteneciente a Ciudad de Córdoba.

Al mismo tiempo, este medio descubrió más de 20 coches de la ex Tamse a nombre de la UTE de Ersa y Autobuses Santa Fe en un predio deportivo sin utilizar, pero cobrando subsidios nacionales. Coches que, curiosamente, el Secretario de Transporte de la Municipalidad dijo que podrían sumarse a la flota de las empresas que se hagan cargo de los corredores de Ciudad de Córdoba.

Por lo pronto, los miles de pasajeros que deben viajar por distintos motivos en las líneas azules tienen que soportar grandes demoras en las paradas de colectivos debido a que la frecuencia de los servicios se ha reducido drásticamente en los últimos días, incluso más que anteriormente.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *