En consonancia con la situación que atraviesa la empresa municipal de transporte Tamse, principalmente el conflicto entre los directivos y trabajadores y el servicio que presta, el ex funcionario Omar Grenat opina al respecto.
«Para comenzar y entender que una razón social puede ser pública o privada, hay que tener claro que es solo eso, una cosa jurídica, el alma y el corazón de una empresa la hacen sus recursos humanos conducidos por sus dirigentes.
TAMSE desde su fundación ha tenido altos y bajos, producto sin lugar a dudas de la alta rotación de funcionarios, lo que hace muy difícil la aplicación de políticas de mantenimiento preventivo y predictivo, indispensables para estas empresas, pero sin lugar a dudas se puede hacer funcionar.
Un ejemplo de ello es la gestión a cargo de Ignacio Olloco durante el año 2011. Se comenzó el año con alrededor de 70 coches rotos pero con mucho trabajo por parte de los empleados y con la conducción de las autoridades, en menos de dos meses se redujo más del 50 por ciento y se entregó la empresa con solo 25 coches rotos.
A pesar de las dificultades de la transición, donde las actuales autoridades no quisieron hacerse presente, nadie visitó la planta Mosconi sino hasta después de una semana de asumidas las nuevas autoridades.
Entonces me pregunto, si son los mismos trabajadores, lo único que cambio fue la dirección ¿Cuál es el motivo para que hoy la empresa AGONICE y tenga de promedio 100 coches rotos?
Lo que piden los delegados es la compra de unidades, y si bien puede paliar la situación, no es la solución. Un ejemplo de ello es que al 14 de Marzo de 2013 el 50 por ciento de los coches incorporados en el 2011 estaban rotos.
La única solución transitoria que tiene TAMSE es que sus dirigentes y asesores -que los tiene- se pongan a trabajar no ya en grandes proyectos sino en la diaria de lunes a lunes, estando junto a la gente en el taller, recorriendo las líneas a la noche y ocupándose de la seguridad, entre otras cosas, en lugar de vivir pensando en mentiras y declaraciones en contra de los trabajadores.
Un ejemplo de eso es lo del Concejal Be Sellares el 14 de marzo a la noche, donde deja entrever que los accidentes son a propósito, y toda la responsabilidad de lo que ocurre en la empresa es de los directivos, así lo es en cualquier organización. Privatizarla o no es una decisión política, pero podrían hacerlo bien.
Si la van a privatizar no malgasten más un peso por favor, ya fue suficiente con los 24 coches sin rampa que incorporaron y traten de regularizar el servicio porque es inhumano, sobre todo para los vecinos de zona sur.»
Especial – Por Omar Grenat
Ex Director de Operaciones de Tamse
En toda empresa, inclusive las privadas, si no se ejerce un control, los bienes de uso, máquinas, rodados etc, se van deteriorando. Es imprescindible que las reparaciones sean inmediatamente, dentro de las posibilidades presupuestarias, pero con el paso del tiempo, los deterioros son mayores y las pérdidas por las paradas de líneas de producción aumentan geométricamente.